Pero... ¡Cuántas opciones de harinas hay!
¿Ha tenido que venir la celiaquía a mi vida para darme cuenta de eso? ¿Hubiera comprendido, yo, el problema celíaco si no hubiera entrado en mi casa?
No podemos culpar tanto a los demás y enfadarnos tanto cuando no conocen o nos preguntan cosas, para nosotros absurdas, como si somos muy celiacos o poco. Lo importante es que muestren, aunque sea un poquinino, interés. Habiendo interés iremos evolucionando. No desanimemos.
El trigo ha sido el salvador de grandes hambrunas y, por eso, es muy difícil dejarlo en un segundo plano y erradicar su universalidad en las cocinas.
Trabajemos para concienciar que no dependemos del trigo, que se puede cocinar sin él, que para muchas personas, muchísimas, mas de lo que nos pensamos... es un veneno. Un veneno que las mata poco a poco y a algunas casi sin percibirlo.
No se es muy celíaco o poco como se está generalizando en preguntar. Sí que hay personas que tienen manifestaciones externas mas claras que otras pero a todas, repito todas, les hace el mismo daño.
Si has optado por dieta sin gluten sin ser celíaco... mejor estate calladito. Créeme que confundes al personal hostelero y nos haces mucho daño.
Y puesta la guindita en este post vamos con la receta!!!
1/2 Kg. de Gambones frescos
100 grs. de kikos (mirad bien que sean aptos que muchas bolsas llevan harina de trigo)
50 grs. harina de garbanzo (que sea apta o hecha en casa)
50 grs. harina de arroz
2 dientes de ajo
Unas hojas naturales de perejil
1 huevo
sal
Aceite para freir.
Preparación:
1. Preparamos la harina de rebozado mezclando bien en una picadora los kikos, harina de garbanzo y arroz, dientes de ajo y hojas de perejil.
2. Pelamos los gambones.
3. Batimos bien el huevo hasta que aumente de volúmen y lo veamos espumoso.
4. Pasamos los gambones por harina, huevo y de nuevo por harina.
5. Freímos, sacamos y los dejamos sobre papel que recoja el aceite.
Presentación:
Se prepara una salsa alioli. Se ponen pegotitos en un plato y sobre ellos se sujetan "de pie" los gambones.
Espero que os guste,
Lourdes