Peleando con la dermatitis atópica

Creo que mejor recordemos, primero,  unos conceptos:

Dermatitis herpetiforme: Se produce por la ingesta de gluten en muchos celíacos y se manifiesta en forma de vesículas pruriginosas. En nuestro caso, creemos que la niña llegó a tener una vesícula de ese estilo justo antes del diagnóstico de la celiaquía y, por su dieta sin gluten, no hemos vuelto a conocer este problema.

Dermatitis atópica: Es una reacción autoinmune en la piel y se manifiesta en forma de eczema. No tiene nada que ver con el gluten y la celiaquía pero es curioso que suele darse en personas que tienen otros problemas con el sistema inmune. Recordemos que la celiaquía es una enfermedad autoinmune.

Enfermedad autoinmune: Es una enfermedad causada porque el sistema inmunitario ataca a las células del propio organismo. El sistema inmune se equivoca en su ataque y es por eso que es tan difícil encontrar una cura a estas enfermedades.


Dicho esto os cuento nuestra experiencia con la dermatitis atópica:

Es un tema que me pone muy nerviosa y, quienes lo padecen, me comprenderán hasta que punto es desesperante porque ante un brote lo único que obtenemos como solución médica es que hay que tener paciencia y si es muy fuerte pues nos recetan crema de cortisonas.

Los dos brotes de dermatitis anteriores de la niña nos pasamos dos inviernos completitos con el problema a base de  cortisonas recetadas por el dermatólogo y nivea para hidratar. Mejoraba y empeoraba continuamente pero no se curaba.

Se le pasará con la edad nos decía el médico.Y lo creí pues pasó el tiempo y la niña tenía una piel preciosa y morena pero, algo tenía que ocurrir y coge la varicela por segunda vez. Sí, por segunda vez porque parece que no tenía suficientes defensas. Un alivio que, al menos, era flojita y con poquitos granos pero la muy puñetera (perdón... me sale del alma) despertó, de nuevo, la dermatitis atópica y en dos días estaba la niña con un eccema descomunal por todo el cuerpo y sólo se libraba la cara, manos y pies.

Entonces el médico nos dice que la debe ver un dermatólogo, la cita para el dermatólogo nos la dan para mes y medio, y en urgencias nos confirman, de nuevo, que es una dermatitis atópica y volvemos a lo de siempre: cortisonas y paciencia.

Sólo que esta vez.. ni quise las cortisonas ni quise tener paciencia.. tenía que encontrar algo rápido y utilicé los conocimientos que no tenía hace unos años.


Para empezar establecí unas normas:

Duchas cortas con jabón de pueblo. Aprendí hace tiempo que es el mejor cicatrizante. A falta de ese jabón pues lo mejor es utilizar jabón lagarto ó el de glicerina.

Para hidratar la piel nada de cremas grasas sino la específica de pieles atópicas de Mercadona. Para mí.. la mas barata y la de mejor resultado.



Y lo segundo que hice, que eso sí que me salió muy caro pero si os digo la verdad, hay que descontar lo que me hubieran costado las cortisonas durante todo el invierno y hay que valorar la satisfacción que se obtiene.

Que conste que no pretendo hacer publicidad alguna, reitero que esto es sólo nuestra experiencia y estamos todos muy contentos.

A lo que voy, le compré un pijama de Skintoskin que tuve en casa en dos días y con el que, la niña, duerme. En su web podréis comprobar que su composición es algodón, algas marinas y plata con lo que reúne unas cualidades antisépticas, calmantes y curativas para la piel.


El resultado lo notamos la primera noche pues fué la primera que no se despertó por picores .. ¡¡No se despertó y durmió de tirón!! Al no rascarse por la noche amaneció sin apenas irritación y la dermatitis parecía mas tenuee.

Las fotos que aporto no se aprecian mucho, son de mala calidad, hechas con diferente luz y comprenderéis que, ni yo estaba con ánimo de hacérselas ni la niña de dejarse. Pero os cuento los resultados:



En la primera foto se ve la irritación parcialmente apagada porque los dos primeros días actuamos a la desesperada y la poníamos nivea y aceite de argán que, al menos, la calmaba momentáneamente los picores pero no tenía ninguna traza de mejorar.

Al tercer día, ya tenía en mi poder el pijama y fué cuando, empapados de información, actuamos tal y como cuento aquí.  Jabón de pueblo, crema para pieles atópicas de Mercadona y pijama Skintoskin.

La segunda foto está hecha a los 10 días del brote y 8 de nuestro tratamiento. No hay absolutamente ninguna irritación. La piel se muestra mas clarita y con manchas blancas. Estas manchas blancas, según me explicó luego el dermatólogo, son zonas en las que ha renovado totalmente la piel pues eran zonas en las que llegó a estar en carne viva. Sobre todo las zonas de detrás de las rodillas y codos eran horribles..

A día de hoy, han pasado unos 20 días y la damos por curada de este brote. Sigue durmiendo con su pijama especial a modo de prevención y ya se permite baños largos.

Aquí puedes ver un vídeo sobre la dermatitis que me recomendó mi dermatólogo para que los niños lo entiendan.


Editado en dic. 2013

No ha vuelto a tener brote de dermatitis. Sí que le he visto en alguna ocasión la piel reseca y he vuelto a la utilización del pijama e hidratación por miedo a nuevo brote.

Además, aprendí que el omega 3 y 6 son fundamentales y comprendí que al igual que le ponía la crema que lo contiene no estaría mal introducirlo en la dieta. Así que le hago croquetas de salmón y gambitas.

Lourdes