La dieta de los celiacos lleva exceso de almidón

¿Por qué mi celiaquina se llena enseguida y come poco?

¿Por qué muchos celíacos acaban con dolor de barriga aún haciendo dieta sin gluten?

¿Por qué me ha sentado como una bomba algún producto sin gluten?

A ninguna de las 3 preguntas se puede contestar con un grado de certeza alto porque, obviamente, entran en juego muchos factores como los gustos, sensibilidades, contaminaciones, pero... estoy segurísima que en el mundo celíaco estamos abusando del almidón y esto forma parte de la respuesta.

Y si no... mirad en el etiquetado de cualquier paquete de harina sin gluten o cualquier producto elaborado.. ¿Qué leeis primero? Sí, almidón de maiz

El almidón es necesario en la dieta porque nos aporta energía y está presente en todos los cereales, arroces, vegetales, legumbres que consumimos de forma natural. 
Pero nosotros, lo estamos añadiendo de forma extra y de forma artificial a la dieta. Creo que estamos todos de acuerdo ¿verdad? Comemos mas almidón que el resto de la población en general. 



Y ¿Esto de consumir mas almidón?... ¿Tiene efectos negativos? 

En mi opinión y por 3 puntos que expongo: 

1. El almidón no es fácil de digerir ya que se requiere de enzimas ramificantes para su sintetización. Además, no se puede digerir si se consume en crudo y eso provoca dolor de barriga. Me viene a la cabeza esos panes sin gluten que, para hacerlos mas rústicos y aparentes tienen harina por ecima... uffff.

2. Nutritivamente no aporta nada pues es un almacen de glucosas y solo nos sirve para convertirlo en energía. O hacemos también deporte extra o la acumulación de grasa será inevitable.

3. Consumiendo tanto almidón caemos, sin pretenderlo, en decremento del consumo de proteínas. Y las proteínas sí que son ricas nutricionalmente porque contienen aminoácidos.




¿Tiene base mi opinión?

Con estas ideas por mi cabeza, que creo que entran dentro de la pura lógica, busqué información al respecto y, curiosamente, me topé con el estudio del Inmunólogo Alan Ebringer que descubrió que eliminar de la dieta los almidones suponía un magnífico tratamiento contra la Espondilitis Anquilosante y, posteriormente, en sus estudios descubre que es necesario esta recomendación en numerosas enfermedades, sobre todo las autoinmunes y aquellas que cursan con dolor e inflamación... ¿Sabéis qué está incluído en su lista? Sí... la celiaquía.

Se está profundizando en estos estudios y si tenéis ganas de leer a fondo AQUÍ tenéis una FUENTE muy reciente aunque, si indagáis por la red, veréis que es una línea muy secundada por los especialistas.

Ahora entiendo el por qué algunos médicos recomiendan a los celíacos, tras su diagnostico en el que se indica evitar el gluten de por vida que, al menos durante el primer año, hagan dieta a base de productos naturales evitando, además, los productos especiales sin gluten.



Mis propuestas para mejorar la dieta de los celíacos:


1. Si eres de los que no acabas de estar bien y te duele muy frecuentemente la barriga prueba a reducir el almidón (tan presente en los productos elaborados sin gluten), al menos durante una temporada hasta que tu intestino no tenga inflamación. Yo que quieres que te diga... después de leer el estudio médico arriba enlazado creo que no dudaba en probar.

2. Lee el etiquetado de los productos sin gluten que compras y procura elegir los que añaden cereales o legumbres (arroz, quinoa, guisante, altramuz...) Que no sean solo elaborados a base de almidón. Dirás que se encuentran pocos... es verdad pero ya se están poniendo las pilas las empresas y empezamos a tener harinas integrales, panes integrales, espaguetis de quinoa...

3. Por supuesto... ¡Cocina! Lo casero es muuuuucho mejor y variado. Rebozamos con harina de garbanzo, hacemos bechamel con harina de arroz, bizcochos con arroz, quinoa, castaña, teff... ¡Evita el almidón de maiz!

4. El recurso número 1 del celíaco para matar el hambre cuando sale de casa es coger una bolsa de patatas fritas... Hombre pues ocasionalmente si hay que recurrir a ello pues se recurre pero si resulta que te pasa tooooodos los días pues echa al bolso un plátano por ejemplo... ¿no te parece? Recuerda que las patatas son puro almidón.

5. Hemos de trabajar para reducir el almidón en nuestros panes. Lo veo fundamental. Si compras mix para hacer pan busca harinas integrales sin gluten, que yo conozca están en el mercado la Brot de Schar, Celibene integral y Doves Farm integral y si deseas hacer mezcla casera pues elige harinas de cereales enteros e intenta reducir el almidón. La mayoría de las recetas que se encuentran por la red llevan un porcentaje alto (altísimo) de almidón (maizena, de yuca, de patata) y poca proporción de harina de cereal entero. Vamos... ¡que no por utilizar mezcla casera lo hacemos mucho mejor! Es normal pues el almidón facilita mucho la panificación pero debemos mejorar ¿de acuerdo?

6. He aprovechado a comprobar el valor nutricional de las harinas de cereales completos y me he llevado una sorpresa pues resulta que el arroz es el que menos valor tiene y, sin embargo, de los que mas utilizamos. Así que mi consejo es que intentes utilizar harina de arroz integral en vez de refinado y añade harinas a tu despensa con alto valor nutricional cuyas 3 ganadoras en este (mi) ranking son: la quinoa. el teff y ... ¡la avena!. (Recuerda que se añade como apta para los celíacos siempre y cuando se especifique que es sin gluten y procede de una producción controlada sin contaminación)

7. Salvo por consejo médico de que evites totalmente el almidón porque eres de los que no terminas de recuperarte no es necesario que lo elimines pero... Busca equilibrio. Ya sabes que nuestros productos sin gluten están hechos prácticamente de almidón así que debes combinarlos siempre con proteína, verdura, y frutas.

  • Si desayunas bollería industrial sin gluten pues no pidas para comer espaguetis sin gluten.
  • Si vas a comer espaguetis sin gluten pues cocínalos con verduras, almejas, atún... hay muchas combinaciones posibles pero... ¿con bechamel?... Noooo!!! A no ser que lo cocines tú y lo hagas con arroz por ejemplo.
  • Los bocatas para los niños pues observa como dejan la mitad (¡matemático!) Procura panes integrales que ya se encuentran o hacerlo en casa añadiendo cereales completos.
  • Si vas a comer pan con la carne pues procura que esa carne no te la pongan con patatas sino con ensalada.


8. El mejor consejo de todos: habiendo multitud de platos que no requieren de productos especiales... ¡elije mejor! Entre una fabada asturiana y unos espaguetis (ambos sin gluten)... ¡¡Hombreeeee...!! ¿Cuál eliges?


Todo lo expuesto tiene su lógica ¿verdad?... ¿Qué añadiríais? ¿Qué quitaríais?

Espero que os guste,

Lourdes