Tortilla de patatas

Quise ilustrarme sobre el origen de la tortilla de patatas para poder hacer una reseña previa como me gusta hacer en mis post y, es alucinante, las citas que se le dan a su historia: que si un general del siglo XIX para dar de comer a sus tropas... que si un chef belga en el siglo XVII... otras citas como a un Marqués extremeño... ¡Perdonen! Pero no me creo nada... La tortilla de patatas solo puede ser obra del apaño de una madre.

Sea como sea es un básico famoso en la cocina española, es un plato humilde y económico pero, a la vez muy apreciado. Tiene tantas fórmulas como cocineros existen y, por ello, es raro que falte en las fiestas populares un concurso de tortillas a ver a quién le sale mas rica.

Me ha costado mucho superar el ranking en mi casa y superar a la número 1, la de la yaya. En mi casa les gusta así... como os voy a contar:







Ingredientes:

1 kg. de patatas
1 cebolla
Aceite de oliva
5 huevos
sal

Preparación:

1. Se pelan y se cortan las patatas en rodajas finas y pequeñas.

2. Se pela y se corta la cebolla en juliana

3. En una sartén se pone a calentar abundante aceite de oliva.

4. Se echa al aceite la cebolla. Se espera un minuto y a continuación la patata. De esa forma tienen un punto de dorado la cebolla.

5. Mientras se fríe bien y removemos vamos batiendo en un cuenco amplio los huevos y salamos.

6. Escurrimos muy bien las patatas con la cebolla y pasamos al bol del huevo. Removemos bien y dejamos reposar 5 minutos.

7. Mientras, preparamos una sartén antiadherente y ponemos a calentar con una gotita de aceite.

8. Echamos la mezcla en la sarten y repartimos uniformemente. A los 3 minutos aproximadamente le damos la vuelta ayudándonos de un plato amplio y cuajamos la tortilla por el otro lado.



Así es como gusta mas... Tierna por dentro, cuajada por fuera y con la cebolla un pelín caramelizada.

Nota: Es un básico al que recurrimos en el mundillo celíaco sobre todo en los viajes. Pedimos que nos pongan un trozo de tortilla de patatas, que nos lo corten con un cuchillo limpio y no nos pongan pan en el plato.

Espero que os guste,

Lourdes