Me estoy pasando el verano haciendo salmorejo cordobés. Creo que lo puedo definir como mi plato de verano favorito... ¡Qué vicio le he cogido! Ha habido días que ha sido mi comida y mi cena... ¡sin mas! No me apetecía otra cosa.
Y claro, como recordaréis en la receta, yo cuelo las pepitas y piel de tomate que hay que aprovechar y he encontrado una opción que me gusta mucho.
Ya se sabe: ¡Hasta el rabito todo es tomate!
Dependiendo de la madurez y variedad que haya utilizado en esa ocasión se quedará en el colador mas o menos "resto".
La piel está muy fina y no es desagradable de comer porque ha sido molida en la batidora y junto con las pepitas se unta un poco de pan, sal y aceite y es una gozada.
A ver si puedo pillar tomate de Miajadas que, justo ahora, es el mejor momento de ir allí.
Pues voy con la receta del aprovechamiento que le he hecho este verano y que mas me gusta:
Ingredientes:
50 grs. de Aceite de oliva virgen extra.
Un pimiento rojo.
2 dientes de ajo
Sobra de tomate
Perejil picado, pimienta y sal
2 cucharadas de buen vinagre.
Preparación:
1. Trocear el pimiento rojo en tiras y echar a rehogar en una sartén con el aceite.
2. Trocear los dientes de ajo muy finitos y añadir a la sartén a los 5 minutos.
3. Pasados otros 5 minutos añadir las pepitas y piel de tomate, bajar el fuego, poner una tapa a la sartén y dejar freir durante 15 minutos. Vigilad y removed de vez en cuando.
4. Añadir perejil picado, pimienta, sal y el vinagre. Remover y dejar reducir unos 5 minutos. Si lo veis muy seco, antes de los 5 minutos de reducción, añadir una cucharada de agua.
Servir con unas rebanadas de pan tostado como acompañamiento. (Utilicé de la marca Beiker sin gluten)
Espero que os guste,
Lourdes